“La Felicidad es un estado mental vacío de expectativas”

Enric Corbera

Hace unos cuantos años, quien era mi pareja por aquel entonces, me regaló un pequeño cuadernillo de post its donde cada página venía ilustrada con unos dibujitos simpáticos acompañando a un mensaje positivo al estilo de los que vienen en los sobres del azúcar. Recuerdo uno en el que aparecían dos piezas de pan y un bollito sonriente le decía a una especie de mollete:

“juntos lo conseguiremos todo, todito, todo, será pan comido”

Pues bien, a las dos semanas de eso, me dejó. No eres tú, soy yo, tenemos que hablar, y al carajo el bollito feliz. Desde entonces hago ayuno intermitente y no desayuno tostadas.

Creo en la psicología positiva, estoy convencido de que en gran medida nuestro lenguaje modula y amuebla nuestro pensamiento, me encantan las habilidades blandas y el día en que yo falte, quiero que la gente me recuerde más por ser buena persona que buen psicólogo. Todo esto lo compro de antemano, pero si en aquella libretita maravillosa hubiesen intercalado un post it donde un granjero mirase a un pollo con cara circunstancial y le dijese “me gustas un  huevo, pero lo nuestro tiene fecha de consumo preferente”, seguramente me hubiese servido para ajustar mejor las expectativas.

Jose Manuel Chirino

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